La ceremonia será durante la Santa Misa que presidirá el Arzobispo en Berón de Astrada.
El Señor bendecirá en este tiempo jubilar a la Iglesia de Corrientes con un nuevo diácono. Jorge José Barrientos recibirá el ministerio de manos del Arzobispo y por la oración de la Iglesia mañana, durante la Santa Misa que se celebrará a las 19, en la parroquia San Antonio de Berón de Astrada.
Desde hace varios meses José realiza tareas pastorales en la parroquia de Berón, por ello decidió ordenarse allí, en el marco de los festejos patronales. El eligió para este momento tan especial de su vida, la frase “Sirvan al Señor con alegría” (Sal 100,2). “Rece durante el retiro de preparación para el diaconado este salmo, y lo elegí como lema porque siento que así debe ser la vida de uno en el servicio, tiene que ser en alegría, en paz, en armonía, en unidad. Porque no somos empleados sino que somos hijos de Dios y hermanos en Cristo por el bautismo; entonces, como no agradecer esa gran familia que se le dio a uno que es la Iglesia, como no agradecer a Dios y la intercesión de los santos ante Dios, cómo no servir con alegría, sabiendo que uno no está solo”, compartió José.
Jorge José tiene 45 años, es hijo de Gregorio Francisco y Cirila Ojeda, tiene dos hermanas, María Elizabeth y Cecilia, una sobrina, Luz y un cuñado, Víctor. Su familia es de Corrientes, del barrio 17 de Agosto. Allí fue a la Escuela Nº 369 donde hizo la Primaria, mientras que la secundaria la cursó en el Colegio Industrial “Bernardino Rivadavia”. Estudió en el nivel terciario el Profesorado de Filosofía, y le quedaron tres materias para recibirse de profesor de Geografía.
La fe José la vivió desde siempre en su familia. “Mi familia fue inculcándome la fe, los valores, el rezar. Fui recibiendo desde chico esos valores, lo bueno, como se trata a los demás”, cuenta. En cuanto a cómo fue descubriendo su vocación sacerdotal, asegura que la sintió desde siempre, “en cuanto a mi llamado a vivir esta vocación, creo que el llamado siempre estuvo. Sentí el llamado siempre pero se hizo más profundo a los 21 años, más o menos. ¿Cómo lo descubrí? leyendo la Palabra de Dios, me gustaba mucho leer la Biblia y ahí fui descubriendo este llamado al sacerdocio. Aunque de niño jugaba a que hacía Misa, se hizo más profundo cuando fui creciendo, los fui descubriendo en el trabajo también”. Recordó que trabajó de pintor, de albañil, como ayudante de electricista, entre otras cosas.
“Como lo siento a Dios lo podría resumir con esto: un papá bueno que siempre está y siempre me acompaña, me da su amor incondicionalmente. Lo mismo de Jesús, un hermano que está siempre, y mamá Marías es la protectora, que uno por ahí siempre la necesita y ella está, siempre te acompaña en los momentos más difíciles, siempre está, como Dios. Esa es mi experiencia con Dios, es el que siempre me hizo y me hace bien. No sólo porque me hace bien me acerco a ellos, sino porque uno experimenta el amor de ellos”, asegura José.
Sobre sus experiencias pastorales, José contó que su parroquia de origen es Jesús Misericordioso, aunque estuvo más ligado a la comunidad de la capilla Virgen de los dolores que está cerca de su casa. “Formé parte del grupo misionero, de la Legión de María, era catequista, estuve en varios grupos”. Durante su etapa de formación en el Seminario Interdiocesano “La Encarnación”, de donde egresó el año pasado, relató que “me asignaron primero a una parroquia de Resistencia, Santa Cruz, después en tercero de Filosofía durante la alternancia me tocó la parroquia Santa Catalina, luego Virgen del Valle, Cristo Obrero, el santuario de San Cayetano y Perpetuo Socorro en Corrientes. Y ahora está en San Antonio, en Berón, allí “hago de todo un poco, mi tarea es acompañar a los catequistas, a los monaguillos, ayudar a limpiar la parroquia, visitar a los enfermos y llevarles la comunión, también hago celebración de la Palabra”.